martes, 15 de diciembre de 2015

Margaritas

Tu presencia es como una tina de margaritas.



Puedo disfrutar de su belleza o ahogarme en ella.


Apareces, y comienzas a llenar el agua con esas flores.

Me metes en la tina y me endulzas con ellas, pero tanta dulzura hace que me pierda, y no te das cuenta.
                                                              
Sigues llenándome en ese mundo de palidez y pureza en pétalos, con sus centros amarillos como mis faros en la oscuridad.

Creo que estoy sintiendo lo más cercano a la felicidad. Pero de alguna manera las flores comienzan a romperse de tanto haber permanecido en el agua, y se llevan lejos mi seguridad.

Vacía. Queriendo de nuevo las margaritas que me entregaste, pero tú ya te has marchado.

1 comentario:

  1. Es una lastima que no escribas tan seguido, siempre disfrute tú escritura.
    Atentamente NN

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